miércoles, 27 de febrero de 2008

Enmudecida, me contengo. Te con tengo.
Yo quiero parar, mirar y seguir.
Quiero tirarte por mi balcon, que caigas en una nube, que nada te lastime.
Pero quiero sin vos en mi cabeza. Esa es la diferencia. Yo no cumplo la promesa. Y esto cada vez cuesta mas.

Llegamos y el tren ferno, ahi bajaste, sin mirar.
Yo me quede. Pense que talvez algun dia eso podia volver a arrancar. Pero vos seguiste. Sin mirar.
Como siempre.

sábado, 23 de febrero de 2008

Dormirte.

Feliz y despertarte de nuevo. Y dormirte. Asi son los resultados del amor en los momentos de paz.

- ¿ Y yo te hago bien ?
Asi te sentis, bien -pero no lo digas, mejor que nadie te crea demasiado-. Hay momentos en que el silencio es la formula secreta para sentir la conexion.
Algo de vos lo atrae y no queres que un par de palabras sacadas de contexto lo aterren y corra hasta desaparecer.
Algo de vos lo atrae y seguir insistiendo aturde, abruma y aburre. Para que, si los sentimientos estan ahi. Apoyados sobre la mesa, sin otro lugar a donde ir. Vos los estas cuidando, que de tu boca no salga nada no quiere decir que estes mintiendo.
Que el lo sepa, puede ser.
Que no le creas, tambien.


Feliz y dormirte de nuevo. Y despertarte. No te cansas de ver esos ojos. Y esas mañanas con el sol acariciendo tu desnudez, su transpiracion, sus deseos. Esas mañanas en que todos los objetos de la casa te observan con respeto, porque el te pertenece. En esos segundos de oscuridad hay mil chucherias que saben que él tambien piensa que vos, que por esa noche sos de su pertenencia.
O eso quiere.



Feliz y despedirnos de nuevo. Y encontrarnos. Cada encuentro una palabra mas de él y un silencio mas tuyo. Una atraccion cada vez más magnifica.
O insignificante.
Como a ustedes les parezca.